A la hora de elegir unas gafas, no solo importa la graduación o el color. La forma de la montura influye directamente en cómo armoniza con tu rostro, tu estilo y tu personalidad. Las gafas redondas y cuadradas son dos de las opciones más populares, y cada una transmite una imagen distinta. ¿Cuál es la ideal para ti? Todo depende de cómo quieres verte… y de cómo eres. De todas formas, vamos a darte unos cuantos tips que pueden ser útiles en caso de que tengas dudas sobre si es mejor lucir gafas redondas o cuadradas.
¿Cuándo conviene elegir gafas redondas y cuándo gafas cuadradas?
Según tu look diario y personalidad
Las gafas redondas suelen asociarse a un estilo más creativo, bohemio o alternativo. Si te identificas con un look relajado, vintage o artístico, este tipo de montura puede reforzar tu identidad visual y añadir un toque de originalidad. Son perfectas para quienes disfrutan saliéndose de lo convencional y apuestan por la autenticidad.
Por el contrario, las gafas cuadradas transmiten una imagen más estructurada y profesional. Ideales para personas prácticas, decididas y con un estilo más sobrio o elegante, estas monturas aportan carácter y definición al rostro. Si buscas proyectar seguridad, solidez y precisión, las gafas cuadradas encajarán con tu energía.
Aun así, muchas personas combinan elementos de ambas estéticas. Si tu estilo es versátil, puedes tener un par de gafas para cada faceta: unas redondas para momentos informales y otras cuadradas para entornos laborales o más formales. Lo importante es que reflejen quién eres y te hagan sentir cómodo.
Según tu peinado y estilo de vida
El peinado influye más de lo que parece. Si llevas un flequillo recto o cortes muy simétricos, unas gafas redondas pueden suavizar los ángulos y aportar fluidez. En cambio, si tienes el cabello rizado, con mucho volumen o estilo despeinado, las monturas cuadradas pueden equilibrar el conjunto con líneas más definidas.
También hay que pensar en tu día a día. Si practicas deporte, trabajas frente a una pantalla muchas horas o cambias constantemente de ambiente, necesitas unas gafas cómodas y funcionales. Las monturas cuadradas suelen ofrecer mayor cobertura visual y estabilidad, mientras que las redondas aportan ligereza y un campo visual más abierto, ideales para quienes se mueven con libertad.
En contextos creativos o ambientes informales, las gafas redondas suelen verse más relajadas. En cambio, si trabajas en entornos empresariales, jurídicos o de atención al cliente, las monturas cuadradas pueden ayudarte a transmitir profesionalidad y orden sin renunciar al estilo.
Tendencias actuales en gafas redondas y cuadradas
Ambas formas están de moda, pero cada una evoluciona con matices. Las gafas redondas han vuelto con fuerza gracias al auge del estilo retro, el minimalismo escandinavo y las influencias del mundo digital. Monturas metálicas finas, lentes oversize o acabados translúcidos marcan la tendencia actual para quienes buscan un look fresco y diferente.
Las gafas cuadradas, por su parte, se reinventan con materiales innovadores y diseños más suaves. Ya no son exclusivamente angulosas: muchas combinan bordes rectos con esquinas redondeadas, lo que las hace más versátiles y favorecedoras. Son la elección de quienes quieren marcar presencia sin perder equilibrio estético.
Una tendencia creciente es la de mezclar estilos: monturas híbridas que combinan formas redondeadas con detalles estructurados. Así, se consigue una estética moderna, adaptable y equilibrada, ideal para quienes no quieren encasillarse.
Descubre qué te favorece
Gafas cuadradas para cara redonda
Otra opción es elegir tus gafas en función de la forma de la cara. Las caras redondas se caracterizan por tener mejillas marcadas, frente amplia y una mandíbula suave, sin líneas demasiado angulosas. En estos casos, el objetivo al elegir unas gafas es crear contraste y definición. Las gafas cuadradas para cara redonda son ideales porque sus líneas rectas y anguladas aportan estructura, alargando visualmente el rostro y afinando sus proporciones.
Este tipo de montura ayuda a romper con la simetría del rostro, generando un equilibrio visual más dinámico. Cuanto más marcados sean los ángulos de las gafas, mayor será el efecto de estilización. Por eso, muchas personas con rostro redondo prefieren monturas cuadradas grandes o rectangulares, que potencien ese juego de contrastes.
A la hora de elegir materiales, puedes optar por gafas de acetato con volumen si quieres reforzar la presencia, o por diseños más ligeros si buscas un resultado discreto. En ambos casos, las monturas cuadradas aportan un extra de definición y carácter, muy favorecedor en rostros redondeados.
Gafas redondas para rostros angulosos
Si tu rostro es cuadrado, rectangular o triangular, con una mandíbula marcada o pómulos definidos, las gafas redondas pueden ser una excelente elección. Su forma curva suaviza los contornos faciales y aporta un efecto visual más relajado y armónico. Este tipo de monturas gafas contrarresta la rigidez de los ángulos, ayudando a equilibrar el conjunto del rostro.
A su vez, las gafas redondas evocan una estética más desenfadada y artística, perfecta para quienes buscan suavizar su imagen sin renunciar al estilo. Pueden ser tan sutiles o atrevidas como desees: desde monturas metálicas finas hasta modelos oversize que se convierten en un verdadero statement de moda.
Elige gafas con proporciones acordes a tu rostro: si tienes una mandíbula ancha, es preferible optar por monturas redondas de mayor tamaño para equilibrar las zonas inferiores. En cambio, si tus facciones son más rectas pero proporcionadas, puedes jugar con estilos más pequeños o minimalistas. En cualquier caso, las gafas redondas para rostros angulosos son una forma eficaz de añadir suavidad sin perder identidad.
¿Y si tienes la cara ovalada o alargada?
Los rostros ovalados son los más versátiles a la hora de elegir gafas. Su equilibrio natural permite combinar tanto gafas redondas como cuadradas sin grandes complicaciones, siempre que se mantenga la armonía en tamaño y proporciones. Es un tipo de cara que admite distintos estilos, por lo que puedes permitirte experimentar con formas, colores y materiales.
En el caso de los rostros alargados, lo ideal es elegir gafas que aporten horizontalidad y volumen en la parte media del rostro. Las monturas redondas pueden ser muy útiles para acortar visualmente la longitud facial, mientras que las cuadradas —especialmente si tienen líneas más anchas o estilo aviador— ayudan a marcar la zona de los pómulos y equilibrar la verticalidad.
Lo importante, en ambos casos, es evitar modelos demasiado estrechos o finos que alarguen aún más la cara o resten presencia. Si tienes la suerte de contar con un rostro ovalado o alargado, aprovecha la oportunidad para explorar sin límites y elegir las gafas que mejor expresen tu estilo personal.¿Aún no sabes qué forma elegir? En Óptica Universitaria encontrarás una amplia selección de gafas redondas y cuadradas para todos los estilos de rostro. Déjate asesorar por nuestros expertos y encuentra ese modelo que encaja contigo… como un guante.